Un año más llega un taquillazo de Bayona a la Fiesta del Cine. Las primeras críticas leídas coinciden en decir que la película concentra lo mejor y lo peor del cine de éste director. Sin pensármelo, me acerco al cine para ver si consigue hacerme caer la lagrimilla como ya hizo con “Lo imposible”. Hoy toca hablar de “Un monstruo viene a verme”.
“Un monstruo viene a verme” (2016) – Vista el 24/10/2016
Título original: “A Monster Calls” (108 min.)
Director: J.A. Bayona
Guión: Patrick Ness (Novela: Patrick Ness)
Reparto principal: Lewis MacDougall, Sigourney Weaver, Felicity Jones y Liam Neeson
Género: Drama
¿De qué va? (Sin Spoilers)
Conor es un niño de 12 años que ha sufrido la separación de sus padres, que en la actualidad vive con su madre enferma de cáncer y que tiene problemas en la escuela. Todos esos problemas los mirará de afrontar gracias a la ayuda de un monstruo, pero la tarea no será fácil.
Trilogía maternofilial
Juan Antonio Bayona es uno de los directores nacionales más reconocidos fuera de nuestras fronteras. Su debut “El orfanato” llamó la atención a todos los aficionados a los géneros de terror y de suspense de tal manera que al final llegó hasta el gran público en general. La película apadrinada por Guillermo del Toro, nos presentaba una madre que pretendía abrir de nuevo el orfanato en el que creció de niña para convertirlo en una residencia para niños con discapacidad. Con ésta película abría su particular triologia maternofilial, y se nos mostraba una Belen Rueda magistral interpretando a esa madre obsesionada con su hijo, en una película con un ambiente que recordaba mucho a una película de otro director español: “Los otros”.
Gracias al reconocimiento y taquillazo que supuso “El orfanato”, Bayona pudo rodar su segundo (y gran) proyecto: “Lo imposible”. En esa película con reparto internacional (unos brutales Naomi Watts y Ewan McGregor) se nos narraba la historia real de una familia española que sufrió en sus carnes el Tsunami que arrasó las costas del sudeste asiático en Diciembre del 2004. Resultó un gran drama. Una película de las llamadas “de llorar”, pero “de llorar mucho”. Y además consiguió gran taquilla a nivel mundial y mayor reconocimiento gracias a las nominaciones a Globo de Oro y Oscar de Naomi Watts por el papel de madre sufridora. Aquí aparecía otra vez la relación de una madre y su hijo, ésta vez para luchar por la supervivencia de ambos.
En ésta tercera ocasión Bayona quiere cerrar la trilogía maternofilial contando la relación entre una madre enferma de cáncer y su hijo de 12 años, que aparte de vivir la enfermedad de su madre, ha de lidiar con la separación de sus padres, una abuela fría y dura y problemas en su escuela. Con todos esos ingredientes voy preparando el paquete de clínex y listo para abrir el grifo.
Un monstruo viene a hablarme
Lo siento, pero no lloré. Y no será por qué no iba dispuesto. Me gustó mucho “El orfanato” y disfruté dándolo todo con “Lo imposible”, pero ésta vez no he entrado en la película y en la historia que nos narra. De hecho, la mayoría de la sala tampoco lo ha hecho. He escuchado más toses y movimientos para cambiar de postura (yo me incluyo) que sollozos o sonidos de sonarse los mocos. La excepción es la señora que estaba sentada a mi derecha, que prácticamente en los créditos ya iba con el armamento cargado para disparar.
En la película Bayona nos quiere mostrar como un niño es superado en su entendimiento y emociones por una situación que cuesta de gestionar incluso para las personas más mayores: el cáncer de su madre. Ésta enfermedad unida a otras circunstancias, hacen que el día a día del chico sea un infierno personal. La forma que tendrá de superar la situación es mediante la aparición de un gran monstruo que mediante la narración de historias, le ayudará a entender mejor su realidad. Aquí aparece lo mejor de la película, la factura técnica tanto del monstruo como de las historias que narra, que se podrían considerar cortometrajes de animación en sí mismos y que parecen cuadros de acuarela en movimiento. Con la figura del monstruo y sus historias, la película reivindica la imagen del “cuentacuentos” clásica y nos la traslada a una narración actual, y también nos muestra la abstracción de la realidad de un niño, entrando en un mundo de fantasía, para poder superar sus miedos. Por el tipo de imágenes mostradas, que sea una producción española y que Bayona siempre haya considerado a Guillermo del Toro como su mentor, me parece imposible no mencionar “El laberinto del Fauno”. En ella, aparece un personaje fantástico que narra también la historia principal y vivimos como la protagonista en múltiples ocasiones entra en situaciones fantásticas para superar los problemas de su cruel realidad.
A pesar de no innovar en ese sentido, Bayona siempre tiene pulso firme para saber en qué momentos acentuar el drama, marcando momentos bien puntillados en el guion y increscendos constantes en la banda sonora, consiguiendo que sí que haya situaciones en la que se nos encoja el estómago como espectadores. El problema es que en ésta ocasión se le ha ido un poco de las manos y las situaciones son demasiado evidentes, la sorpresa brilla por su ausencia y el final, que supuestamente ha de ser sorpresivo e impactante, es totalmente esperado. Eso unido a un ritmo muy pausado a lo largo de toda la película, consigue que no entremos en ella, consiguiendo que la película no sea una de las “de llorar”, sino una “de las lentas”.
Para cerrar, comentar que el reparto está realmente bien, especialmente la abuela, una Sigourney Weaver que no hay papel que haga mal y el monstruo, que aunque digital, creo que merecería la pena poder oír en VO para escuchar la voz del gran Liam Nesson. El problema de todas las actuaciones es que acaban absorbidas por la grandilocuencia que se quiere mostrar en muchos momentos y es en las pequeñas situaciones (pocas) cuando mejor funcionan.
Como detalle de diseño y como he dejado caer en el título de la Crítica: ¿Soy el único que ve demasiado parecido al monstruo de Bayona con Groot de “Guardianes de la Galaxia”? Incluso también diría que parece un Ent sacado de “El señor de los anillos”…
Resumiendo que es gerundio
Ritmo demasiado lento en todo el metraje para una película con una historia que pretende tener más trasfondo del que realmente tiene. Un monstruo espectacular en cuanto a sus efectos especiales y con unas narraciones muy bien realizadas en formato de cortometrajes de animación. Buen papel de Sigourney Weaver como abuela, exceso de remarcado emocional en muchos momentos e insisto: ritmo muy lento. No hace caer la lágrima como lo hizo “Lo imposible” y sí que provoca constante movimiento en nuestro asiento. La peor de la trilogía maternofilial.
Lo mejor: los dos relatos del monstruo y el papel de la abuela (Sigourney Weaver)
Lo peor: ritmo lento durante todo el metraje y falta de sorpresa en su desenlace
Te gustará si… eres un acérrimo de Bayona y de lágrima fácil
La odiarás si… te esperas un festival de la lágrima como fue “Lo imposible”
Me gustó más que: La vida de Pi
Me gustó menos que: El laberinto del Fauno
Nota: 6/10
Jo també vaig trobar-la una peli molt lenta i, plorar, gens ni mica.
Ara, m’haguessis vist quan vaig tancar el llibre! Bramant estava!
El tema és que vaig anar a veure la peli perquè em semblava que l’escriptor havia participat en el guió i que per tant m’agradaria, però va resultar que la historia no em va entrar de la mateixa manera.
També et diré que molta gent havia entrat al cine pensant que veuria un film de terror…
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Bones Montse! Jo crec que es una peli que s’ha de veure i que té projecció internacional, però realment crec que no es mereix moltes de les bones crítiques que està rebent. Jo esperava molt més. I això de la gent que anava a veure una de por diu molt de la campaña de marketing que hi ha darrere: s’ha de veure encara que no tingui ni idea de que vaig a veure!
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