Masterclass: Mitos Vol. 2

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Wallapop, Duchamp, Rossy de Palma, Madrid, Carmen Maura, Cannes, Álex de la Iglesia… Efectivamente, David M. vuelve con otro de sus mitos. Hoy, el Vol. 2: Pedro Almodóvar.

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sobre mí

Me llamo David. Nací en los 80. Crecí en los 90. Sobrevivo en el siglo XXI. Soy de Sega, no de Nintendo; de Nesquick, no de Colacao; de Nocilla de dos colores, no de Nutella; de Tente, no de Lego. Para mí, la humanidad se divide en dos tipos de personas: las que aman y las que odian a Maradona. Yo, evidentemente, soy de las primeras. Con el DeLorean de Marty McFly viajaría al pasado para tomar una copa y charlar con el amo de todo esto.

sobre Mitos

No esperen críticas ni análisis. En estas tres breves entregas les hablaré de mis tres ídolos cinematográficos. Nada más. Tres relatos que bien podrían ser tres cartas de agradecimiento y pura admiración. Tres historias que tienen en común un inicio basado en la amistad y que cuentan con anécdotas, alguna información y pinceladas de absurdidad, contradicción y banalidad. Tres textos completamente subjetivos y fundados en nada. O quizás sí… Y es que, cuando hablamos de ídolos, ay, amigos míos, ahí la cosa cambia por completo. La racionalidad pasa a un segundo plano. A ellos se lo perdonamos todo. Podemos coincidir con la gente que considera que cada artista tiene dos o tres grandes obras en su haber y el resto son secundarias, relleno. O bien con los otros, los que opinan que lo importante no es la obra en sí misma o la voz de un artista en concreto, sino el contexto o la época. Vale, de acuerdo. Pero reconozcámoslo. A todos nos ha pasado. Un buen día, en un instante decisivo, se obró la magia y nos sucedió algo maravilloso, extraordinario, irracional, casi místico: surgió la pasión. Pues bien, de eso trata Mitos. De tres directores de cine que son la vida. Sean bienvenidos y pónganse en pie con…

pedro almodóvar

por David M.

Por Wallapop. Así redescubrí a mi segundo mito: Pedro Almodóvar. Sí, sí, redescubrir. Porque con Almodóvar no fue como con Sorrentino, que lo desconocía. Hacía muchos años, había visto alguna película suya sin más trascedencia. Tenía alguna otra pendiente, pero fue pasando el tiempo y ahí seguían. Ahora, echando la vista atrás, creo que todo eso sucedió porque aún no estaba lo suficientemente preparado. Necesitaba que pasase mucho más tiempo, concretamente, hasta hace cosa de dos años, cuando, gracias a Wallapop, me compré un pack con once de sus películas. Las vi y, literalmente, aluciné. Poco a poco empecé a profundizar en su obra y a investigar más y más. Doy fe de ello.

Ya completamente consciente de mi misticismo, tuve la suerte de ver en la gran pantalla su última obra: Julieta. Pero ahí no acaba la historia. Quién me iba a decir a mí, que el mito se haría más mito un 3 de marzo de 2017. Durante el ciclo “Marzo Todo Almodóvar” en el Cine Doré de Madrid, pude conocerlo personalmente. Llovía, pero no importaba. Ese día apareció un Pedro entregado, relajado, radiante y feliz, al que nos rendimos y al que, a su entrada, respondimos como se merece: en pie y con una larguísimo aplauso. Una ovación de cariño y admiración a partes iguales al Maestro. Ese día vimos La Ley del deseo. Ya la había descubierto en casa, pero nada comparable a la intensidad que produce visualizarla en un entorno único como lo es un cine con encanto, en la gran pantalla, con un aforo reducido y en comunión con un público completamente entregado y rendido a la causa que no es otra que la de celebrar y festejar a Pedro y su cine. En definitiva, una catarsis colectiva. Y es que, no me diréis que no os pasa como a él, que “el cine, ver películas, hablar de ellas, soñar con verlas, escribir sobre ellas, escribirlas, coleccionarlas, buscarlas por almacenes, tiendas especializadas, plataformas digitales, recordarlas, que formen parte”1 de vuestra vida, no “es la experiencia más importante […] y la que más está durando”1. Coincido con él también, cuando opina que el cine, las películas, “están llenas de vida como la propia vida” y las entiende “como representación de la realidad”1. En ese sentido, me encanta un recuerdo de la niñez de Pedro que relata de la siguiente manera: “Aunque a mis hermanas no les gusta que lo recuerde, en estos primeros pasos extremeños la situación económica familiar era precaria. Mi madre fue siempre muy creativa, la persona con más iniciativa que he conocido. En La Mancha se dice: «Es capaz de sacar leche de una alcuza». La calle donde nos tocó vivir no tenía luz, el suelo era de adobe, no había modo de que pareciera limpio, con el agua se enlodaba. La calle estaba en las afuera del pueblo, había surgido sobre un terreno pizarroso. No creo que las chicas pudieran caminar con tacones por las escarpadas pizarras. Para mí aquello no era una calle, me recordaba más a un poblado de alguna película del Oeste. Vivir allí era duro pero barato. En compensación, nuestros vecinos resultaron ser personas maravillosas y muy hospitalarias. También eran analfabetos. Como complemento al salario de mi padre, mi madre empezó con el negocio de la lectura y escritura de cartas, como en Estación Central de Brasil. Yo tenía ocho años; normalmente era yo quien escribía las cartas y ella quien leía las que nuestros vecinos recibían. En más de una ocasión yo me fijaba en el texto que mi madre leía y descubría con estupor que no correspondía exactamente con lo escrito en el papel: mi madre inventaba parte. Las vecinas no lo sabían, porque lo inventado siempre era una prolongación de sus vidas, y quedaban encantadas después de la lectura. Después de comprobar que mi madre nunca se atenía al texto original, un día se lo reproché de camino a casa: «¿Por qué le has leído que se acuerda tanto de la abuela, y que echa de menos cuando la peinaba en la puerta de la calle, con la palangana llena de agua? La carta ni siquiera nombra a la abuela», le dije yo. «¡Pero has visto lo contenta que se ha puesto!», me dijo ella. Tenía razón. Mi madre llenaba los huecos de las cartas, les leía a las vecinas lo que ellas querían oír, a veces cosas que probablemente el autor había olvidado y que firmaría gustoso. Estas improvisaciones entrañaban una gran lección para mí. Establecían la diferencia entre ficción y realidad, y cómo la realidad necesita de la ficción para ser completa, más agradable, más vivible”2. Esos contrastes entre lo rural y lo urbano, entre Extremadura-La Mancha y Madrid-El Mundo, durante una etapa tan vital como es el traspaso de la infancia a la edad adulta, forjan a un Pedro completamente ecléctico, capaz de abarcalo todo, desde, por citar dos ejemplos recientes, ser el próximo modelo de Prada, hasta ejercer de presidente del Jurado de la 70 edición del Festival de Cannes. Esto último, para más inri, junto con mi otro mito. Cómo me encantaría estar ahí! Hay que hablar, también, de la relación entre él y su hermano Agustín. Daría para una película. Relación laboral y fraternal, forjada desde los inicios. Siempre unidos, en una especie de pack indivisible, incluso en la gran pantalla con las apariciones de un Agustín actor que encarna variopintas profesiones. También, para otro capítulo, daría la relación de Pedro con sus actrices. Reconocida con: el premio a la mejor interpretación femenina en Cannes, su pasión y excitación por Penélope3, su querida Chus Lampreave, la actriz “que mejor interpretó»4  los personajes inspirados en su madre, su relación con Carmen Maura, la actriz que se fijó en Pedro cuando “era el último mindundi»5 y apostó por él “desde el primer momento y antes que nadie”5 o de como Rossy de Palma conoce a Pedro6 y pasa a ser la punta del iceberg de las “Chicas Almodóvar”.

De Almodóvar me gusta la emoción que transmite su cine, su trato de los sentimientos más profundos y las relaciones humanas. El cine de Pedro va más allá de lo que se ve. Es un cine de capas, de matices. Perdón, rectifico: de muchísimos matices. Por eso, no podemos quedarnos tan solo con lo que “vemos” en pantalla. Como ocurre con El Gran Vidrio de Duchamp, que fue ideado para ser contemplado acompañado de las notas de La caja verde, el cine de Almodóvar, además de verse, necesita ser leído; necesita de una información adicional para poder entenderse en su conjunto, necesita, en definitiva, perspectiva. En ese sentido, ayudan los vídeos de Jorge Luengo y el magnífico libro de Paul Duncan y Bárbara Peiró. Porque, de un director capaz de acuñar, popularmente, un término con su apellido no podemos quedarnos únicamente en la superficie.

A Almodóvar, como muy acertadamente opina Álex de la Iglesia: “nunca se lo agradeceremos lo suficiente”7. Algún día, muy probablemente cuando ya no esté, no como, por ejemplo, ya han hecho otros, le rendiremos todos los homenajes habidos y por haber. Pero ya será demasiado tarde. Hoy, ya transcurrido mucho tiempo, me doy cuenta de que, quizás, he tardado demasiado y que, quizás también, no era el momento adecuado. Sea lo que sea, por fin he logrado comprender por qué Pedro Almodóvar es el director vivo preferido de mi director de cine favorito y que, en casa, es Dios. Así que os animo a festejarle y aplaudirlo ahora. El mundo entero ya lo ha hecho, serás tú el último? Yo, por suerte, ya no. ¡Gracias por tanto Pedro!

 FILMOGRAFÍA 

LIBROS

  • Patty Diphusa (ficha)
  • Fuego en las entrañas (ficha)
  • Los archivos de Pedro Almodóvar (ficha)
  • Guión de La piel que habito (ficha)
  • Guión de Todo sobre mi madre (ficha)
  • Guión de Carne trémula (ficha)
  • Guión de Volver (ficha)
  • Guión de La mala educación (ficha)
  • ‘Hable con ella’ Fotografías de Pedro Almodóvar (ficha)
  • Conversaciones con Pedro Almodóvar (ficha)

BIBLIOGRAFÍA

  1. Almodóvar, Pedro: Soñar el Cine, la experiencia inagotable. Texto que acompaña la retrospectiva “Marzo Todo Almodóvar”, Filmoteca Española (2017).
  2. Almodóvar, Pedro: El último sueño. (14/09/1999). Disponible en: http://elpais.com/diario/1999/09/14/opinion/937260006_850215.html
  3. RTVE. Almodóvar. Todo sobre ellas. Disponible en: http://www.rtve.es/alacarta/videos/el-documental/documental-almodovar-todo-sobre-ellas-almodovar-musas/3716960/
  4. 20 minutos (05/04/2016): http://www.20minutos.es
  5. El Mundo (07/03/2017): http://www.elmundo.es
  6. Vice (24/08/2016): http://www.i-d.vice.com
  7. Fotogramas (08-05-2017): http://www.fotogramas.es

AGRADECIMIENTO

Gracias a mi amigo Carles por “hiperdescubrirme” a Almodóvar.

2 respuestas a “Masterclass: Mitos Vol. 2

  1. Pingback: Sorteo: Pack de Almodóvar (2 películas y un press-book) | Un hombre sin piedad

  2. Pingback: Colaboraciones: Un hombre sin piedad en… «Girona FM» -Fútbol y cine- | Un hombre sin piedad

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