Galardonada con el premio al mejor director en el Festival de Cannes y consiguiendo premios y nominaciones por festivales de todo el mundo, llega de la mano de Pawel Pawlikowski una obra sobre amores incomprendidos en tiempos convulsos. Hoy toca hablar de: «Cold War».
“Cold War” (2018) – Vista el 13/12/2018
Título original: “Zimna wojna” (88 min.)
Director: Pawel Pawlikowski
Guion: Pawel Pawlikowski y Janusz Glowacki
Reparto principal: Joanna Kulig, Tomasz Kot, Agata Kulesza y Borys Szyc
Género: Drama, Histórico
¿De qué va? (Sin Spoilers)
En la Polonia de los años 50, Wiktor, un director de orquesta y profesor de música, tiene el encargo de recuperar las canciones que forman parte del folclore polaco. Busca cantantes y bailarinas para un nuevo espectáculo, y en una de las pruebas conoce a Zula, una joven con la que tendrá una relación de amor a lo largo de los años.
Ni contigo ni sin ti
«Cold War» es el nuevo film de Pawel Pawlikowski que precede a «Ida», una obra de 2013 que obtuvo el Óscar a la mejor película de habla no inglesa y que fue galardonada y aplaudida allá por donde pasaba. El director vuelve a centrar su relato en personajes de su Polonia natal, y de nuevo, los ubica en momentos históricos complejos (en «Ida» en los años 60, y en la presente «Cold War», en los años 50, en plena guerra fría).
Wiktor es director de orquesta y profesor de música en una escuela de música polaca. Junto a otra maestra y al director del centro, se dedica a viajar por los pueblos de la Polonia de los años 50 con el objetivo de grabar las canciones del folclore popular. Su intención es recuperar una parte de su historia que parece olvidada, y que las nuevas generaciones la puedan interpretar sobre un escenario. Para ello buscan a jóvenes cantantes y bailarines que puedan ir de gira. En una de las pruebas, Wiktor conoce a Zula, una joven con un pasado turbio de la que se enamora profundamente. La historia de amor de Wiktor y Zula tendrá múltiples vaivenes debido a sus caracteres y a la complejidad de la época en que les ha tocado vivir. Un amor vivido intermitentemente a lo largo de los años y a través de muchos países y que hará que pasen por diferentes estados en su relación: pasión, cariño, odio, celos, necesidad, rechazo… Pero siempre con la necesidad de volver a encontrarse y estar juntos. Un amor imposible. Una fuerza autodestructiva.
Pawel Pawlikowski juega con tres elementos claros en «Cold War»: la historia de amor imposible entre Wiktor y Zula, el complejo contexto histórico de la época en una Polonia de posguerra y la música omnipresente a lo largo de la vida de los dos protagonistas. Wiktor y Zula siguen caminos diferentes, pero la pasión entre los dos los llevará a conectar irremediablemente a lo largo de los años. Los tiempos turbulentos en los que viven no les ayudarán a vivir fácilmente, y serán un gran elemento distorsionador en su ya compleja relación. Y la música. Una música que les unió en la escuela y que seguirá presente en sus vidas en los espectáculos en Berlín, en los clubs de jazz de París o en los estudios de grabación. Canciones que nacen del folclore de los pueblos, de la tradición del boca a oreja y que aunque se transformen y se reinterpreten, serán canciones que les acompañarán a lo largo de sus inestables vidas.
«Cold War» parece una película de otra época. Filmada en blanco y negro y presentada en formato 4:3, la obra consigue transportar al espectador a otro tiempo, a otro cine. La iluminación, la fotografía y las composiciones de las escenas consiguen realzar los rostros de los actores y actrices, otorgan al film una textura de cine clásico y dejan imágenes de enorme belleza. Las elipsis presentes a lo largo de la película muestran grandes saltos temporales para centrarse en momentos determinantes en la relación entre Wiktor y Zula, pero consiguen dejar un poso de necesidad haciendo que deseemos saber más de las vidas de los protagonistas. Desconocemos su pasado y sabemos muy poco de su presente, haciendo que se genere cierta distancia entre nosotros y las vivencias de los protagonistas. Pawlikowski presenta una obra impecable a nivel técnico, con grandes actuaciones y una gran banda sonora para una angustiosa historia que se inspira en la compleja vida y relación de sus padres. Amores que matan, nunca mueren.
Resumiendo que es gerundio
«Cold War» es la segunda obra de Pawel Pawlikowski director de la galardonada «Ida». En esta ocasión vuelve a centrar la historia en el pasado de su Polonia natal, para fijarse en la turbulenta historia de amor entre Wiktor y Zula, un profesor de música que está preparando un espectáculo que pretende recuperar la música del folclore polaco y una energética alumna con mucho carácter. Su historia de amor y autodestrucción nos llevará a lo largo de la década de los años 50 por diferentes ciudades y países, y aunque la pareja protagonista siga caminos que se bifurcan, el amor que surge entre ambos los llevará a conectar irremediablemente a lo largo del tiempo. Desesperanzadora, distante y de una factura técnica impecable que recuerda al cine de antaño, Pawlikowski consigue presentar una obra de enorme belleza visual y sonora que hará las delicias de los amantes del cine de autor y del cine clásico.
Lo mejor: la actuación de la pareja protagonista. La historia de amor y desencanto narrada de forma poco habitual. Las bien planteadas elipsis temporales. La fotografía, iluminación y profundidad de campo que realza tanto los rostros de los personajes como los escenarios. La banda sonora. La duración. Su desenlace.
Lo peor: no conocer más de las vidas de los personajes protagonistas (especialmente en los momentos en los que no están juntos). La distancia que genera su propuesta formal en ciertos momentos. El aura de tristeza que te invade tras verla. Que se la tilde fácilmente de intelectual o gafapasta.
Te gustará si… eres un apasionado del cine clásico y te gusta que se recupere introduciendo ciertos cánones modernos. Te interesa profundizar en historias personales alrededor de épocas complejas a nivel histórico y político.
La odiarás si… valoras el subrayado en las escenas, no soportas la constante presencia de música en una película, no te llevas bien con el cine de autor y te generan rechazo las obras en blanco y negro.
Me gustó más que: Call Me by Your Name
Me gustó menos que: La ciudad de las estrellas (La La Land)
Nota: 8/10
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