Cierro el relato del primer fin de semana en el festival de Sitges. Después de la primera crónica hablando del encuentro con Nicolas Cage, y de la segunda, en la que hablaba de las 7 películas vistas entre el viernes y el sábado, en esta crónica me centro en las 6 películas vistas entre domingo y lunes, la grata sorpresa que me llevé al acercarme a ver al Rubius y los encuentros que tuve con compañeros cinéfilos. En la crónica de hoy: «Tipo duro busca redención y el afortunado asesino en serie».
Con pocas horas de sueño encima, el sábado me enfrento a una jornada más tranquila que la anterior, con tres películas por delante: «The Invocation of Enver Simaku», «Galveston» y «Killing (Zan)». Todos los planetas se alinean y consigo llegar a Sitges con tiempo, así que decido acercarme a ver la que hay organizada en la zona de prensa para recibir a El Rubius, un YouTuber que presenta una serie de animación producida por Movistar. Fans nerviosos, muchos fotógrafos y curiosos como yo esperamos a que haga acto de presencia. Al llegar, se desata la locura.
Tanta expectación no me acaba de convencer, así que busco la Carpa Melià para tenerla localizada y llegar lo antes posible cuando arranque el encuentro con Nicolas Cage (tienes el enlace a la transcripción de le entrevista completa clicando aquí). Al llegar tengo la grata sorpresa de ver allí a Àlex Gorina, periodista de radio y televisión. No me puedo aguantar y me acerco a decirle lo mucho que me gustaba su programa «Klaatu barada nikto» de TV3, donde presentaba cada noche un clásico del cine de terror. Àlex estuvo increíblemente amable e incluso me confesó que las presentaciones que hacía el al principio del programa para introducir las diferentes películas eran totalmente improvisadas. Todo un maestro.
Con muy buen sabor de boca después de haber charlado con Àlex, me voy hacia la sala Tramuntana a disfrutar de las tres película que tengo programadas.
«The Invocation of Enver Simaku» (2018)
de Oscar Lledó Escartín
Julien perdió a su mujer en Albania hace 18 años. Con intención de esclarecer lo sucedido, se embarcará en un viaje plagado de grabaciones, testigos e informes policiales.
«The Invocation of Enver Simaku» es la ópera prima del director Marco Lledó Escartín. Un proyecto personal en el que se mezcla la investigación de un asesinato sucedido en el pasado con hechos históricos reales y las fábulas y leyendas existentes en Albania. En un tono extraño mezcla de película de terror y documental histórico, la obra es un sin fin de entrevistas a testigos relacionados con el brutal suceso que aconteció en el pasado. La matanza de Puerto Hurraco trasladada a la realidad de una Albania que en esos años pasaba por grandes cambios políticos y sociales que convirtieron esa época en una de las más caóticas y trágicas de su historia. Una propuesta inicialmente interesante que abruma por la cantidad de información ofrecida en voz en off y en la que no acaba de encajar su mezcla de géneros.
«Galveston» (2018)
de Mélanie Laurent
Roy ejerce de matón para la mafia de Nueva Orleans. Su vida da un giro el dia que le diagnostican un cáncer de pulmón. Su realidad se trastoca, y además, comienza a sospechar que Stan Ptitko, su jefe, quiere deshacerse de él.
«Galveston» es la adaptación de la novela del mismo nombre de Nic Pizzolatto, conocido por ser el principal creador de la serie «True detective», emitida por HBO y dirigida por Cary Joji Fukunaga. Ben Foster y Elle Fanning son los protagonistas absolutos de una obra centrada en la huida de esta extraña pareja forzada a entenderse. Ella es una joven que estaba en el lugar y momentos equivocados. Él un matón cansado de la vida que ha llevado siempre que decide realizar una huida hacia delante y buscar su redención. Con buenas actuaciones, puntuales escenas de acción y simplificando la estructura narrativa de la novela (ésta funcionaba con constantes saltos temporales, la película únicamente realiza un salto) este thriller melancólico cocinado a fuego lento es una adaptación más que correcta de la novela de Pizzolatto. Una grata sorpresa.
«Killing (Zan)» (2018)
de Shinya Tsukamoto
Un samurái llamado Ikematsu es el principal guardián de un pueblo de campesinos. La llegada de un viejo samurái que está reclutando guerreros para luchar por el Shogun, trastocará la calmada vida del poblado.
«Killing (Zan)» supone una visión muy personal del cine de samuráis. Es una propuesta que centra su discurso en hacer visibles las contradicciones y frustraciones del ser humano. El virtuoso samurái que entrena cada día con un joven lugareño y que tiene como misión proteger su poblado, incapaz de matar. La pareja de enamorados que están siempre juntos y se quieren, pero no dan rienda suelta a sus pasiones, provocando que tengan que gestionar su frustración a través de la agresividad. El sabio anciano con principios inquebrantables que toma decisiones con trágicos resultados. Una obra que sucede en un único escenario, con puntuales aunque bien filmadas coreografías de lucha, un ritmo pausado en exceso y un mensaje demasiado reiterativo. Pese a su corta duración de 80 minutos, la obra se eterniza.
Hecho el cierre al domingo. Tren de nuevo a Barcelona para poder cenar con unos amigos y descansar para afrontar la recta final de la primera etapa. El lunes toca ver seguido y sin descanso: «The House That Jack Built», «Kahook (Pig)» y «I Think We’re Alone».
«The House That Jack Built» (2018)
de Lars Von Trier
Jack es un ingeniero que se quiere construir la casa de sus sueños. También es un asesino en serie que ve sus propios asesinatos como obras de arte en sí mismas.
«The House That Jack Built» es la última película del controvertido director danés Lars Von Trier. Después de su polémico paso por el festival de Cannes, donde se produjo el abandono de la sala donde proyectaban el film por parte de gran parte del público, llega su estreno a Sitges. La película muestra una absoluta falta de prejuicios para enseñar cinco sucesos que han marcado la vida de Jack, un brutal asesino en serie. El problema es que Jack ya no siente la misma adrenalina de siempre al matar, así que busca los límites para sentirse cada vez más extasiado. La fortuna siempre le acompaña, y nunca consiguen atraparlo. Con altas dosis de violencia y un sentido del humor muy negro, la obra es una reflexión sobre el arte, el proceso de creación, el propio cine de Von Trier y la polémica que existe a su alrededor. Homenaje a «La divina comedia» incluido.
«Khook (Pig)» (2018)
de Mani Haghighi
Un asesino está decapitando a los directores de cine iraníes y Hasan, un director puesto en la lista negra, se pregunta por qué no quieren acabar con él.
«Khook (Pig)» supone una de mis pocas aproximaciones al cine iraní. Comedia con toques de thriller y drama que narra los problemas de autoestima de un director iraní que no es asesinado como el resto de sus compañeros de profesión. Marcado por su aparición en la lista negra, cosa que le impide filmar películas, su ego se sentirá de nuevo atacado cuando se le ignore en esta trágica cadena de asesinatos. Con un humor sencillo pero que funciona correctamente, la obra resulta fallida cuando su tono cambia dirigiéndose más hacia el thriller y el drama convencional, cambiando incluso el foco de atención de los asesinatos hacia la presión que ejercen las redes sociales en la opinión pública. Inconexa en sus elementos, con imágenes oníricas y alguna escena musical fuera de tono, tiene ideas potentes que hubieran funcionado mejor desde otro planteamiento y desarrollo.
«I Think We’re Alone Now» (2018)
de Reed Morano
El último hombre vivo en la Tierra tiene una rutina muy marcada. Registra y organiza los libros de la biblioteca y recoge los cadáveres de sus vecinos para enterrarlos. Vive tranquilo, hasta el dia que aparece una joven en su pueblo.
«I Think We’re Alone Now» es una nueva propuesta ambientada en un futuro apocalíptico. Peter Dinklage es el protagonista inicial de la película recreando la metódica rutina de un solitario hombre que vive en un mundo vacío. Cuando el personaje de Elle Fanning aparece, el mundo de Peter se resquebraja y ha de aprender a convivir de nuevo con alguien, afrontando sus problemas pasados y presentes. La trama no aporta nuevos elementos al cine apocalíptico, que ha tratado ya otras veces y con mayor éxito los temas de la obra: la soledad, la hostilidad ante otros seres humanos o la convivencia forzosa con estos por la supervivencia y necesidad de compañía. En cierto momento cercano al último tercio, la historia ofrece atisbos de aportar alguna idea original que no se acaba de desarrollar correctamente y que resulta un añadido fallido.
Aparte de las películas, no puedo olvidar hacer mención de todos los compañeros y compañeras de Twitter que nos hemos reencontrado o conocido en el festival.
@AdamToCa: Cuando nos vimos ya llevabas 20 películas… ¡En cuatro días! Me salvaste la vida cuando entré tarde a «The House That Jack Built» y me guardaste un sitio a tu lado. ¡Grande!
@BakeroJordi: Después de conversaciones por Twitter, por fin nos hemos conocido en persona. Más majo no se puede ser, y encima fan del festival de TerrorMolins.
@Cinedepatio: Cruzarme contigo fue prácticamente un milagro. Jurado de la crítica del festival, te tocaba ver más de 40 películas, pero se veía el brillo de la ilusión en tu cara.
@DesdeSofa: Nos hemos encontrado puntualmente unas cuantas veces por el festival, pero ha sido un gusto charlar contigo cada vez que nos hemos cruzado.
@elultimocritico: Un #EspartanoDelCine. Tenía muchas ganas de que nos conociéramos y al final ha sucedido en Sitges. Lo de guardarme sitio en la cola para la sesión de «Climax», un detallazo. Gracias a ti conocí también a @_sassypokemon.
@GammaTeruo: Creo que eres la persona con la que me encontré más veces en Sitges. No se me olvidan los cabezazos que diste viendo «Killing (Zan)». Aluciné al ver que después de la película eras capaz de dar opiniones certeras sobre ella. ¡Un crack!
@InSitgesWeTrust: Fue un encuentro fugaz. Pero ahora ya nos conocemos el careto.
@RRuestes: Un placer las charlas mañaneras sobre cine contigo. Y oye, quizá implantes nueva moda con la forma de llevar la camiseta que te pillaste de «Train to Busan». Por cierto, brutal la camiseta.
@verano_rojo: Nuestro encuentro fue todo un puntazo. No te reconocí por tu brutal cambio de aspecto y me diste una de las mayores alegrías del festival: poder tener en mis manos la película de «Verano Rojo» en DVD.
Cierro esta primera tanda de crónicas. El siguiente fin de semana vuelvo al festival de Sitges para disfrutar de más películas y experiencias. ¡Pronto os cuento!
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